De afuera no parece nada especial la iglesia católica de San Jorge en Oberzell en la isla de Reichenau. A pesar de esto es un documento impresionante de la rica historia eclesiástica y cultural de la isla, la cual en 2000 fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. A fines del siglo IX construyo el abate Hatto III la iglesia de San Jorge. Lo especial son los frescos del siglo X en las murallas de la iglesia - unas joyas de la edad otoniana. Los ocho frescos muestran los milagros de Jesús.